En la primera planta
La Isla de Menorca goza de una historia extraordinariamente rica y mucha de ella relacionada con el Puerto de Mahón, objeto del contenido de este piso. La situación estratégica de la Isla, en el centro del Mediterráneo occidental, la amplitud y profundidad de este Puerto y la bondad de su clima han hecho de Menorca un lugar codiciado por muchos Países.
Desde la antigüedad Menorca estuvo habitada por pueblos que han dejado su recuerdo en la gran cantidad de asentamientos prehistóricos que hoy llamamos la Menorca talayótica.
Hasta el siglo XIII se reconoce la presencia de fenicios, cartagineses, romanos, bizantinos, (Basílicas paleocristianas), vándalos y árabes (muchos nombres locales tienen este origen).
Y a partir de la conquista de Menorca por Alfonso III para la Corona de Aragón (1287) se procede a la repoblación con gentes procedentes de este reino.
El Puerto va incrementando su valor cuando progresa la navegación de altura y las batallas pasan a ser combates en el mar entre escuadras beligerantes. En el Siglo XVIII es Inglaterra quien se interesa por Menorca y la utilización de su Puerto y durante casi 100 años ejerce dominio sobre ella con ligeras interrupciones. La Guerra de los siete años con Francia concede a este último país el dominio durante ese periodo y a España a final de siglo.
A partir de 1802 Menorca pasa definitivamente a España.
El Puerto de Mahón siempre ha sido lugar de refugio, abastecimiento, mantenimiento de embarcaciones de múltiples banderas: Holanda, Alemania, Francia, Italia y Estados Unidos entre otros, además de los ya citados que han ejercido aquí su dominio, han encontrado en estas aguas su lugar de hibernaje y acopio.
Esta exposición, aunque someramente, pretende mostrar fragmentos de esta historia en sus 20 salas. En esta Visita Virtual podrá detenerse en cualquier sala y encontrará descripciones, fotografías y material relacionado en forma de textos o enlaces a la red y cuando proceda, incluso, videos relacionados con la sala.
Le deseamos una visita provechosa.
- Sala 1: En proyecto
- Sala 2: Roma Cartago
En la antigüedad Menorca ya era conocida por los pueblos púnicos, fenicios y griegos que navegaban por el Mediterráneo. Nura o Meloussa fueron nombres que utilizaron para identificar el lugar.
Fueron famosos los Honderos Baleáricos, guerreros especializados que participaron como mercenarios en diversas batallas, entre ellas las guerras púnicas. Magón Barca, hermano de Aníbal les reclutó. Y según Tito Livio, en su honor este puerto pasó a llamarse Puerto Magonis.
En 123 a.C. Roma conquistó la Balearis Minor y se inició la romanización. Menorca paso a ser un punto clave en las rutas marítimas.
Desde el siglo IV a.C. este puerto funcionó como lugar de comercio internacional, Así lo atestiguan diversos objetos hallados en su fondo. De hecho sirvió de escala para los navegantes mediterráneos y fue lugar de intercambio de mercancías con las procedentes de otros puertos.
Cuando el Imperio Romano controló todo el Mediterráneo Menorca fue punto clave en sus rutas marítimas. Tras la conquista de la isla, Roma implantó su estructura administrativa y los tres puertos principales: Mahón, Ciudadela y Sanitja, actuaron como centros políticos, comerciales y fiscales. Todo ello produjo la progresiva modificación del modo de vida indígena.
- Sala 3: Basílica paleocristiana
En esta Isla del Rey o del Hospital existen los restos de una Basílica paleocristiana del siglo VI que fueron descubiertos en 1888 cuando se efectuaban ciertas labores agrícolas. Es conocido que el arte paleocristiano surge en el Imperio Romano cuando el cristianismo sale a la luz desde las catacumbas (Edicto de Milán 313 d.c.) y se extiende por toda la cristiandad.
Las basílicas paleocristianas, inspiradas en las romanas, son el lugar de reunión y culto que utilizan los cristianos. Profusamente decoradas a base de frescos y mosaicos muchas de ellas aún existen (Roma, Ravena…) pero en Baleares, después de los vándalos (454-535) y de la conquista bizantina se produjo la destrucción de las existentes. 11 hay en Baleares de las cuales 7 en Menorca y en dos de ellas se han conservado los mosaicos que llenaban el pavimento. El que se descubrió en la Isla del Rey se conserva (parcialmente) en el Museo de Menorca. El de Fornás de Torello se exhibe cubierto por una estructura que lo protege.
En esta sala son dignos de destacar los mosaicos que son réplica del original descubierto en la basílica paleocristiana de esta Isla del Rey. Son fruto de una colaboración entre el Centro Penitenciario de Menorca y voluntarios de la Fundación Hospital Isla del Rey.
Los paneles hacen referencia al Arte Paleocristiano, a su presencia en Baleares y en Menorca y, particularmente al hallado en esta Isla del cual se han hecho las réplicas que se exponen. También existe la maqueta de la basílica, informada y realizada por el voluntario Antonio Bagur.
- Sala 4: Patrimonio histórico
El Puerto de Mahón cuenta con un importante patrimonio histórico rico en cantidad y calidad. Ello es fruto de las distintas épocas, presencias y circunstancias concurridas que han ido influyendo en su imagen actual.
En él se podrá observar la presencia de construcciones defensivas, como la Estación Naval, la Fortaleza de la Mola o el castillo de San Felipe y sanitarias como este hospital y el Lazareto entre otras.
Junto a ellas existen elementos de arquitectura civil y otros mas modestos ligados a la vida ordinaria. Todo ello constituye un variado e interesante conjunto de diverso origen: español y británico principalmente.
No se puede ignorar la influencia ejercida sobre Mahón y Es Castell, ambos junto a las riberas del Puerto.
- Sala 5: Bizantinos, Musulmanes y Cristianos
- Sala 6: Flotas extranjeras en Port Mahón
El Puerto de Mahón ha sido refugio y base naval de numerosas flotas. En el Siglo XVIII Inglaterra, Francia y España lo utilizaron, en el XIX lo hicieron, además, EEUU, Holanda, Grecia y Rusia.
En el caso de EEUU, la creación del ´´Mediterranean Squadron´´ para luchar contra la piratería obligó a establecer una base naval que fue, en el Puerto de Mahón, la primera fuera de su continente. Se utilizó como tal, durante unos treinta años. Fue la primera escuela naval estadounidense, (Actualmente en Annapolis) y en ella estuvo formándose, entre otros marinos ilustres, David Ferragut que llegó a ser el primer almirante al servicio de la Navy.
Dada la presencia permanente de marinos se fundó un Hospital naval americano en las proximidades de cala Figuera. Y se utilizó un cementerio en la ribera Norte del puerto. En este cementerio existen 44 tumbas que contienen los restos de marinos americanos, ingleses, un alemán y un francmasón español.
En el siglo XVIII, con la presencia de las nuevas flotas y comerciantes de distinto origen, Mahón se convirtió en puerto franco y se establecieron colonias de griegos, judíos y genoveses.
En el mismo siglo XVIII, una escuadra rusa intentó también alcanzar el Mediterráneo, pero el escorbuto y una epidemia de fiebre amarilla hicieron mucho daño a la tripulación. Hubo que construir un hospital y enterrar a los fallecidos, entre ellos Andreas Spiridoff, hijo del almirante de la armada Gregorio Spiridoff. Era la época de Catalina la Grande.
Francia utilizó el puerto como base naval para abstecimiento de barcos y atención a sus heridos durante la conquista de Argel que duró unos 13 años y finalizó en 1830. Holanda también utilizó el puerto con idéntico objetivo.
- Sala 7: Menorca Británica
Durante casi todo el siglo XVIII Menorca estuvo ocupada por los británicos. Aprovechando el conflicto que supuso la guerra de sucesión española, al morir Carlos II sin descendencia, Inglaterra ocupó Menorca. Y salvo dos interrupciones mantuvo su ocupación cerca de 70 años en total. Su presencia quedó consolidada por el tratado de Utrech en 1713 y Menorca pasó a ser española en 1802 (Paz de Amiens).
Esta prolongada presencia y el interés británico por lograr un buen abastecimiento de sus barcos y los servicios de mantenimiento y construcción naval requeridos para ello, modernizaron considerablemente a Menorca. En el legado inglés encontramos el Camí den`Kane, que unía Mahón y Ciudadela, impulsando con ello la economía, fundamentalmente agrícola y ganadera, de los pueblos del interior. Se introdujeron mejoras en el regadío, pastos, ganado y agricultura.
En cuanto a las nuevas instalaciones se creó la base naval, en la colársega del puerto y el arsenal. Se fundó en la Isla del Rey este Hospital Naval, se amplió y fortaleció el Castillo de San Felipe, que había iniciado Carlos V en prevención de la piratería. Se fundó Es Castell, (inicialmente Georgetown y luego Real Villa de San Carlos). Y se hicieron los acuartelamientos de Mahón y Es Castell junto con sus explanadas como patio de armas, y diversos edificios civiles y viviendas.
Durante la presencia británica hubo libertad de cultos y de mercados. Se respetó la organización y administración local basadas en los jurados y universidades. El Puerto de Mahón fue declarado zona franca y se concedió licencia de corso a barcos menorquines. Todo ello mejoró la economía de la Isla.
Esta sala presenta textos, documentos e imágenes relacionadas con lo expuesto.
- Sala 8: Menorca Francesa
Aunque menos conocida que la inglesa la presencia francesa en Menorca ha sido notable ya que se produjo en diversas ocasiones, aunque sólo en una ejerció el dominio de la Isla. Esta fue durante la guerra de los siete años, que enfrentó a Francia e Inglaterra y que, habiéndose iniciado en América por problemas de las colonias, se extendió a Europa. La situación y proximidad de la Menorca británica no fue aceptada por Francia por lo que ésta decidió tomarla y gobernarla mientras durase la guerra. Como garantía Inglaterra tomó Belle Île, al sur de Bretaña. Actualmente ambas islas están hermanadas.
Durante la época francesa o de presencia francesa en Menorca se fundó San Luis, se estableció el Camí de Cavalls, se introdujo el sistema francés de pesas y medidas y se regularizó la moneda. La semejanza de lenguas y la misma religión propiciaron el acercamiento cultural de la sociedad menorquina e hizo que menorquines ilustrados acudiesen a Universidades francesas para ampliar estudios. Igualmente se produjo la traducción de obras de teatro francés al menorquín o al español y hubo una intensa relación cultural.
Hubo presencia de franceses en Menorca durante la guerra de sucesión, en tiempos de la revolución francesa, durante las guerras Napoleónicas, y mientras Francia conquistaba Argelia a partir de 1830, en que se utilizó esta Isla del Hospital para atender a sus heridos y el Puerto de Mahón para reparar y aprovisionar las embarcaciones.
Estos hechos están recogidos en los paneles que presenta esta sala.
- Sala 9: Ocio, uso popular y comercial del puerto
- Sala 10: Mestres d`aixa
- Sala 11: En preparación
- Sala 12: En preparación
- Sala 13: Sala de emigraciones
En esta sala se representa la emigración masiva de menorquines al exterior.
Básicamente son 3 las emigraciones. En el Siglo XVIII a San Agustín de La Florida, (EE UU), en el Siglo XIX a Fort de L’Eau (Argelia) y en el Siglo XX a Córdoba (Argentina).
1ª.- En 1768 salieron de Mahón 1403 personas en 8 barcos, hacia a la plantación de Andrew Turnbull, en el actual área de New Smyrna Beach. Tardaron 5 meses en llegar y fallecieron más de 200 por el camino. Llegaron a Nueva Smyrna pero esa empresa fracasó y provocó el éxodo hacia San Agustín, sede del gobernador de Florida oriental, donde finalmente se asentaron. Actualmente hay 30.000 descendientes que, llevan con orgullo su origen, forman una asociación y con frecuencia organizan actos para recordar – y dar a conocer – su origen.
2ª.- En 1830-35 salieron de Menorca unos 12.000 menorquines (llegó a considerarse que la isla quedaba despoblada). Se establecieron en toda el área alrededor de Argel, sede del gobernador francés, y prácticamente en toda la zona de la bahía. Fort de l’Eau fue uno de los poblamientos de los mahoneses y fue organizado como municipio por Francia, pero los emigrantes se establecieron también en otros pueblos. Fueron muy bien considerados por los nativos, dado que eran responsables, formales, trabajadores y serios.
3ª.- En 1920 un grupo numeroso se estableció en Argentina, en la ciudad de Córdoba. Aun celebran allí actos tradicionales menorquines (fiestas con caballos, repostería, canciones, etc.). Fundaron una «mutualidad de socorros» para atender las necesidades básicas de los menorquines, que aún existe. Tienen una imagen de la Virgen de Monte Toro, a tamaño natural.
- Sala 14: Señales marítimas
- Sala 15: En proyecto
- Sala 16: En proyecto
- Sala 17: En proyecto
- Sala 18: En proyecto
- Sala 19: En proyecto
- Sala 20: En proyecto